Saber como mirar y comunicar. Con cámara fotográfica o sin ella

Observa estas imágenes. ¿Que aprecias?

¿Qué te dicen tus sentidos?

Yo misma quedé sorprendida al mirarlas...

Era la misma imagen pero... ya no era la misma...

Probé el B&N y me gustó el resultado. Mucha más fuerza visual y cinética. Para mi :)

¿Qué sucede en el cerebro cuando se produce un cambio de posición como en estas imágenes?

Obsérvalas con atención. El cerebro no responde igual ante ellas. Y no es sólo por el cambio de color... Lo que digo se aprecia tanto en las que están en color como en las que están en B&N,, pero mucho más en B&N, por esto digo que son más cinéticas...

¿Qué es lo que sorprende?

Desde que estoy observando fotografías de tantos y tantos fotógrafos por internet –que no sólo– percibo que se fijan en particularidades en cuanto a lo visual. Si, son muy buenos visualmente. Mas no es así en cuanto a los otros sentidos. Se les pasa desapercibido todo el mundo que se capta en una imagen. Y en ocasiones también a mi . Si :)

La fotografía es un espacio mínimo. Digo mínimo porque está enmarcado y todo lo que queda fuera no se aprecia, por ello resulta una visión muy reducida del mundo. Pero es parte del mundo y si en ese pequeño espacio ya no vemos esos detalles que tanta información nos aporta ¿qué no sucederá con el modo de mirar la vida en general?.

Ya he leído en más de una ocasión que por internet se pierde mucha información al no poder ver a la persona o personas con las que te comunicas. ¿Comunicas?. De nuevo una paradoja. Resulta que la mayoría no es consciente de que todo lo que hace está comunicando cuando se comunica, y por ello, tampoco percibe lo que comunican los otros...

Os dejo con un texto que habla de saber mirar. De observar.

Este autor habla de la observación. De la importancia del lenguaje no verbal y de la utilización de todos los sentidos. También De Mello lo dice. También yo lo digo. Otros muchos lo dicen o lo han dicho.

Sentir. Esta palabra que se dice pero que no se siente...

Yo personalmente llevo tiempo diciendo que todo lo que hacemos, se vea o no se vea con los ojos, es comunicación. Todo. Saber observar para saber ver y/o sentir al otro, u otros, es tan importante como respirar, ya que no podemos dejar de comunicar al estar vivos; todos estamos conectados en una red interdependiente y cada acto está comunicando. Si no sabemos mirar ¿de que nos quejamos? Aprendamos. Somos unos privilegiados porque no dejamos de aprender ni cuando estamos a punto de morir.

Y no se trata de aprender a fingir, sino de aprender a ser más honestos y sinceros. Espontáneos. Auténticos. Tal como yo lo entiendo: seguir la vía del Tao.

Creada originalmente por haideé iglesias

El texto que sigue pertenece a Joe Navarro. Y si te quejas de que es mucho texto para leer, eso mismo ya habla de ti :)

[…]"El problema es que la mayoría de las personas se pasa la vida viendo, pero no mirando, o como dijo Sherlock Holmes, el meticuloso detective inglés, a su compañero, el doctor Watson: "Tú ves, pero no observas". Por desgracia, la mayor parte de los individuos ven su entorno con el mínimo esfuerzo observacional. Dichas personas son ajenas a los sutiles cambios que ocurren en su mundo. No son conscientes del rico tapiz de detalles que los rodean, como el sutil movimiento de la mano o del pie de alguien, el cual podría desvelar sus pensamientos o intenciones.

De hecho, varios estudios científicos han demostrado que, en general, la gente no es buena observadora de su mundo. Por ejemplo, es famoso el caso de un hombre que se disfrazó de gorila, pasó por delante de un grupo de estudiantes mientras se desarrollaban otras actividades y ¡la mitad de los estudiantes ni siquiera vio el gorila! (Simons y Chabris, 1999, 1059-1076).

Los individuos con una pobre capacidad de observación carecen de lo que los pilotos llaman "conciencia del entorno". No tienen una imagen mental sólida de lo que está sucediendo exactamente a su alrededor, ni siquiera delante de ellos. Pídeles que entren en una habitación llena de gente, dales la oportunidad de que echen un vistazo, y luego diles que cierren los ojos y expliquen lo que han visto. Su incapacidad para recordar hasta las características más evidentes de la estancia te dejará atónito.

A menudo nos encontramos con alguien o leemos sobre alguien a quien los acontecimientos de la vida siempre le toman por sorpresa. Las quejas de estas personas son casi siempre las mismas:

"Mi mujer acaba de pedirme el divorcio. No tenía ni idea de que fuera infeliz en nuestro matrimonio".

"El orientador del colegio me dijo que mi hijo lleva consumiendo cocaína desde hace tres años. Me cogió por sorpresa que tuviera un problema con las drogas".

"Estaba discutiendo con ese tipo y, de repente, me dio un puñetazo a traición. No lo vi venir".

"Pensaba que mi jefe estaba bastante contento con mi rendimiento en el trabajo. No tenía ni idea de que iba a despedirme".

Este es el tipo de afirmaciones que hacen los hombres y las mujeres que no aprendieron a observar el mundo que les rodea de un modo eficaz. Aunque la verdad es que esto no es sorprendente porque, al fin y al cabo, en nuestro desarrollo de niños o adultos, en ningún momento se nos enseña a observar las pistas no verbales de los demás. No hay asignaturas en la escuela primaria, el instituto o la facultad en las que se aprenda a tener conciencia del entorno. Si tienes suerte, aprendes por ti mismo a ser más observador. En caso contrario te pierdes una increíble cantidad de información útil que podría ayudarte a evitar problemas y a hacer tu vida más satisfactoria, ya sea con tus amigos, en el trabajo o con la familia.

[…]

Lo que tienes que hacer es convertir la observación coordinada en un modo de vida. Tomar conciencia del mundo que te rodea no es un acto pasivo. Exige un comportamiento deliberado y constante. Requiera esfuerzo, energía y concentración para lograrlo, así como una práctica constante para mantenerlo. La observación es como un músculo que se hace más fuerte con el uso y se atrofia cuando no se utiliza. Ejercita tu músculo de la observación, y podrás descifrar mejor el mundo que te rodea.

Por cierto, cuando hablo del uso de la observación coordinada, te estoy pidiendo que utilices todos tus sentidos, no sólo el de la vista."