En las lecturas que van llegando a mis manos, leo acerca de la no existencia de Cristo, o más bien de Jesucristo. Uno de ellos es Krishnamurti. Dice que no hay constancia de que los romanos, los cuales tomaban nota de cuanto acontecía, no haya ningún registro de la crucifixión de alguien con ese nombre. También se dice que los libros considerados sagrados nos ayudan poco. Cierto, así puede ser, dependiendo de a quién y en que momento de su vida esté viviendo. Pero, como lo absoluto en cuestión de opiniones no existe, sólo son eso, interpretaciones. Unas veces con más acierto que otras, por ello no se ha de desechar de inmediato todo aquello que otros consideren no válido.
Por esto voy a compartir algo que Osho menciona acerca de la cruz, y que no es la primera vez que este simbolismo se explica así.
Esto que continua es un extracto.
VERTICAL Y HORIZONTAL: EL VIAJE HACIA LAS PROFUNDIDADES DEL AHORA.
La mente proviene del pasado; el estado consciente nunca proviene del pasado, sino del momento presente. La mente es tiempo y el estado consciente es eternidad.
La mente se mueve de un momento a otro en el plano horizontal. Es como un tren; pasado y futuro, varios compartimentos unidos en el plano horizontal. El estado consciente es vertical; no proviene del pasado y no va al futuro. En este momento cae en la profundidad o se eleva verticalmente hacia las alturas.
Es el sentido de Cristo en la cruz, y los cristianos han perdido totalmente el significado. La cruz es una representación, un símbolo de dos líneas encontrándose: la vertical y la horizontal. Todo su ser, excepto las manos, está en la vertical. ¿Qué significa? La acción se sitúa en el tiempo; el ser, más allá del tiempo. Las manos simbolizan la acción. Jesús está crucificado con sus manos en el plano horizontal, es decir, en el tiempo.
La acción se sitúa en el tiempo. Pensar es un acto: es la acción de la mente. Eso también está en el tiempo. Será bueno saber que las manos son la parte más externa del cerebro: la cabeza está unida a las manos. Tu cabeza tiene dos hemisferios: el derecho, vinculado a la mano izquierda, y el izquierdo, vinculado a la mano derecha. Tus manos son extensiones de la mente en el mundo, en la materia, porque la mente es también una forma sutil de materia.
Toda acción, física o mental, está en el tiempo.
Tu ser es vertical. Se mueve e la profundidad, en las alturas, no hacia los lados.
Cuando juzgas, te identificas con lo horizontal. Para emitir un juicio es necesario el pasado. ¿Puedes juzgar de otra manera? ¿De dónde sacarás los parámetros?
Dices que un rostros en particular es hermoso. ¿Cómo lo juzgas? ¿Sabes qué es la belleza? Has visto muchos rostros; has oído hablar a muchas personas sobre rostros hermosos. Y has leído sobre ellos en novelas, los has visto en películas; así tienes una idea de lo que es la belleza. Es una noción vaga, no puedes definirla. Si alguien insiste, te sentirás confundido. Es una noción tan vaga como una nube. Entonces dices: "Ese rostro es hermoso". Pero ¿como lo sabes? Estás recurriendo a tu experiencia pasada, comparando el rostro con es vaga noción de belleza acumulada mediante la experiencia.
Si no recurres al pasado, entonces una cualidad distinta de belleza emergerá No será tu juicio; no provendrá de tu mente ni te vendrá impuesta; no será una interpretación. Se tratará simplemente de una participación de ese rostro aquí y ahora, una participación profunda de ese misterio y con esa persona. En ese momento la persona no será bella ni fea; todos los juicios habrás desaparecido. Un misterio estará ahí, sin nombre y sin juicio; y sólo en ese momento, el amor florecerá.
haideé iglesias
El amor no proviene de la mente, el sexo si; con la mente llevas a cabo una acción y la sexualidad es un acto. El amor no: es un estado del ser, vertical. Cuando miras a una persona sin juzgarla –es bella o fea, buena o mala, pecadora o santa–, de pronto hay un encuentro, una fusión de energías. Esa fusión es hermosa, diferente de todas las bellezas conocidas. Conoces la belleza de la forma; pero la de la fusión carece de formas. Has conocido la belleza del cuerpo; la de la fusión es la del alma. Has conocido la belleza de la periferia; la de la fusión es la del centro. Es interminable.
Aquí lo dejo. En los dos sentidos :)
Son tres imágenes. ¿Puedes mirarlas sin juzgar? Sólo cada una en si misma, nueva totalmente... ¿Puedes? Si puedes entonces estás en la dimensión vertical de la cruz. Si no puedes, estás en la horizontal. Apegado al pasado, ese en que la memoria te hace esclavo del ruido incesante que no ve como encontrar el silencio. Mas... ahí está... Ssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss..................
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Qué el amor ilumine tu inteligencia y abra tu corazón para que las palabras que pronuncies conviertan el mundo en un lugar mejor :)
Sin mentir, encontrarás la luz del amor con más facilidad.
Siente la vida, siéntete a ti mismo, y di lo que sientes, sintiendo lo que dices
La paz es el camino y la humildad sus pies -.-