Lloviendo. No hay excusa para la fuerza del amor

Si tu vida no está colmada de todo lo que te gusta, no significa que no seas una persona buena y amable. El propósito de la vida para todos nosotros es superar la negatividad eligiendo el amor. El problema es que la mayoría de las personas aman y luego dejan de hacerlo cientos de veces al día. No dan amor el tiempo suficiente para que su fuerza atraiga a todas las cosas buenas a sus vidas. Piénsalo un momento: das amor a un ser querido a través de un cálido abrazo, y al momento siguiente dejas de dar amor cuando te enfadas porque no puedes encontrar las llaves, te retrasas en un atasco de tráfico o no puedes encontrar aparcamiento. Das amor cuando te ríes con un compañero de trabajo, y luego dejas de darlo cuando te enfadas porque el restaurante al que vas habitualmente no tiene el plato que querías. Das amor cuando estás esperando a que llegue el fin de semana, y dejas de darlo cuando recibes tus facturas. Éste es el proceso constante que tiene lugar a lo largo del día: das amor y dejas de darlo, das amor y dejas de darlo, das amor y dejas de darlo, constantemente. 

haideé iglesias

O estás dando amor y aprovechando su fuerza, o no lo estás haciendo. No puedes utilizar la fuerza del amor poniendo una excusa  de por qué no has amado. Las excusas y justificaciones de por qué no has podido amar aportan más negatividad a tu vida. Cuando te excusas por no haber amado, vuelves a sentir la misma negatividad, ¡y estás dando más de lo mismo!

Si te enfadas porque hubo un malentendido en una cita y culpabilizas a la otra persona del error, estás usando la culpa como excusa para no dar amor. Pero la ley de la atracción sólo recibe lo que tú estás dando, así que si das culpa, recibirás circunstancias que te culparán a ti. No necesariamente provendrán de la misma persona a la que estás culpando, pero con toda seguridad se producirá una circunstancia en la que se te culpará a tí. No hay excusas para la fuerza del amor. Recibes lo que das, y punto.

Rhonda Byrne