Siempre verde

Creada originalmente por Haideé Iglesias

Paraíso natural, así reza el slogan publicitario de Asturias, pero es posible que se estén equivocando al promocionarla como tal. La afluencia del turismo es cada vez más masiva y ello no conlleva calidad sino sólo cantidad. Hace ya tiempo que se estudia el fenómeno de los viajes en masa, comprobando que la mayoría se comportan como autómatas dirigidos. Hoy aquí, mañana allí; pagan por todo con lo que quieren verlo todo. Es como entrar en un gran centro comercial a comprar, deambulas pero no disfrutas, y cuando hablo de disfrutar hablo de estar plenamente consciente de aquello que haces. Si esto es así y lo haces en la naturaleza, algo que Asturias ofrece en abundancia, te sientes participe del milagro que representa pisarla, olerla, mirarla, sentirla... si no, estarás comportándote como cuando ves una película, que sigues lo que está en la pantalla pero lo haces pasivamente, mucha emoción pero enlatada en un cuerpo sentado en una butaca. Disfrutas si, mas no participas de lo que los actores han tenido que hacer que es el hecho de representarla para que nos resulte creible.

Turismo de masas. Turismo que paga para ver los escenarios donde se desarrolló la película de "La lista de Schindler" sin apercibirse del echo tan tremendamente doloroso del que habla dicha película. Por esto digo que posiblemente Asturias se esté equivocando al poner ese slogan, algo bonito que mirar, pero que no tiene nada que ver con respetar; para respertarlo hay que vivirlo, sentirlo vivo, tanto como si fuera parte de uno mismo, y que así es ciertamente, no podemos separarnos de la naturaleza, somos naturaleza y lo somos más allá de nuestra necesidad de respirar el oxigeno que nos aporta toda la flora. Pero la necesidad apremia y el verde cada vez vende más... espero y deseo que este paraje del Cordal de Peón, el cual entre otros muchos se ha convertido en un área recreativa para preservarla de la compra de particulares y pueda ser disfrutada por todos, no se acabe convirtiendo en un espejismo de si misma. Eso si, sin olvidarme de algo muy importante: que lo que pienso se traduce a mi alrededor. Así que le deseo larga vida a Gaia, este hermoso planeta.

Recordar: lo que pienso, tanto como lo que siento, se traduce a mi alrededor.