Un timbre que llama al corazón

Creada originalmente por haideé iglesias

Un timbre. Un objeto más de los que el hombre ha inventado porque no confía en la vida ni en si mismo.

Aún es posible ver en algunos lugares como las puertas se muestran abiertas... esa apertura que se siente tan cerca del corazón que uno no desconfía de nada ni de nadie. Al contrario que las puertas cerradas que han de ser golpeadas o bien, inventar un artilugio que cumpla esa función. Cuando no existía la electricidad eran las aldabas– o aldabones, como siempre lo oí decir aquí en Asturias– algunas tan bonitas que daba gusto cogerlas para golpear esa puertas cerradas y que resonara en toda la casa, y en todo el lugar... (otro día pondré una imagen de una aldaba)... siendo así posible saber por muchos quien visitaba a quién... es posible que también esto forme parte de esa desconfianza y separación por la que no se dejaban ya las puertas abiertas con tranquilidad para que cada uno entrara y saliera a su gusto...

Esa desconfianza está ya tan arraigada en muchos de nosotros que se nos pasa desapercibida...

Hace algún tiempo me preguntaba –aquí en este espacio– como era que las fotografías de dos personas se parecían tanto. Bien, en este caso todas las puertas no estaban cerradas, eso si, había timbres, pero no timbres al uso, –y eso que se molestaron mucho ambos dos subiendo las entradas a la vez para confundirme, algo que estaba siendo habitual ya desde hacia mucho tiempo, lo de confundirme digo, sin yo saberlo (que bueno es ser ingenuo y que los otros piensen que por serlo eres tonto, que bueno que esto suceda). Como iba diciendo: de esos timbres usé y comprobé que una de estas personas había encontrado en la otra algo en el modo de fotografiar que a él le gustaba, con lo que comenzó a hacer ese mismo tipo de imágenes. También encontré como la inseguridad es algo común en estas dos personas. Y, bueno, como dice el dicho, unos por otros y la casa sin barrer. El caso es que lo que pretendía ser una ayuda por parte de uno se convirtió en usurpación. Algo que parece ser habitual en una de estas personas ya que también sucedió lo mismo conmigo.

Como ya he dicho, todo pasa por y para algo. ¿Por qué consentir que eso ocurriera? Y ya que estoy: ¿por qué borrar dos comentarios, uno de un amigo y otro mío de un blog en el que se mantenía una identidad anónima? Anónima para mi, claro. No así para otros, incluido al que se le borro también el comentario. ¿Por qué no se dio cuenta mucho antes de que no le estaban ayudando y si perjudicando? En fin, que el universo es sabio. Todo lo que parece no tener sentido acaba teniéndolo :)

Que haga ahora estas preguntas no significa que no tenga respuestas. Me entristece que haya personas que entiendan que hacer daño es el mejor modo de vivir en este mundo y en este momento, aunque aparenten estar haciendo lo contrario... Siento de veras que vivan con el miedo pegado a su alma, pero no me extraña que lo tengan ya que viviendo así no se puede hacer mucho más. Llevo tiempo haciendo todo cuanto está al alcance de mi entendimiento para que todo eso pueda cambiar. De corazón deseo que haya una gran transformación para que pueden vivir libres y dejar vivir libremente a todos los demás. El modo en como se ha de conseguir esa transformación ya no está, pienso, del todo en mis manos.

Un timbre, si, esta vez es una llamada para que llegue al corazón de estas personas y para que cuando hablen sea con autenticidad, porque lo han vivido y lo han sentido, y está basado en sus experiencias, y no en la usurpación de las de otros...

Este mundo de internet es una gran vía de comunicación con ella podemos generar un gran movimiento para la paz y el amor. Por favor, que sea eso y no un vertedero de basura mental de todos los asuntos que están sin resolver en nuestro interior, eso que algunos llaman la sombra y otros el inconsciente... y ya me callo, si... :)

Abre las puertas, todas ;)))