Creada originalmente por Haideé Iglesias
Aferrada a la pared vertical, en una rendija, ha afianzado sus raíces. Poco a poco creciendo, lo que le permita el mínimo espacio en el que prendió. Según está tomada la imagen puede llevar a confusión. Estáis mirándola como yo, hacia abajo, se recorta sobre el agua. Estoy apoyada en una barandilla y con la cámara alejada de mi todo lo que dan los brazos, mirando hacia el agua que está abajo. Es agua de mar. Lugares inverosímiles para que se afiance un árbol. Inverosímiles por asumir que lo más común es que lo hagan sobre tierra firme.
La higuera, árbol considerado como sagrado. Mas lo que a mi me tiene fascinada es que es posiblemente uno de los árboles que pervivirá indefinidamente. Ha evolucionado de tal modo que ya no necesita la ayuda de ningún otro ser vivo, es asexual del tipo partenocarpio ("dicho de un fruto que se ha desarrollado de un ovario no fecundado" y/o "sin polinización ni fecundación.") El banano, el plátano y la piña, también lo son; otros ejemplos de supervivencia.
Hay tantos milagros en la naturaleza, tantos. Y no digo milagros en el sentido distorsionado que de esta palabra se han podido derivar, sino del que significa la vida. Esa que nadie es ya capaz de explicar por muchos estudios que se realicen. Se habla, pero no se llega a saber qué es la vida. Para mi, ésta tan sólo es. Y me es suficiente porque he comprendido, no a través del razonamiento, sino del sentir. Por esto una y otra vez me quedo embobada ante la naturaleza. Y esto es lo que nosotros somos, milagros de la naturaleza. ¡Qué gran privilegio! Qué mejor que aprovecharlo para explorar todo nuestro potencial espiritual, ese gran desconocido para la gran mayoría. Y somos eso, espíritu encarnado en un cuerpo material. Ese espíritu es el que ha llevado a la higuera a ser lo que es, y a poder nacer en un mínimo agujero en una pared vertical. Y esto es así por muchas vueltas que se le quieran dar. La energía que alimenta la vida, la energía que lo alimenta todo. Tao. "El Tao que puede ser explicado no es Tao".
Las higueras crecen en los sitios más inverosímiles. Desde luego estás acostumbrada a asomarte a sitios con buenas caídas... yo no sé si me atrevería ni con barandilla.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bella imagen. Bellísima. Y es que cuando te veo y leo, me faltan palabras, Haidée, para expresar los sentimientos, pero yo sé que tú sabes que los sentimientos están ahí. Enhorabuena, maga. Besos azules, solo para ti.
ResponderEliminar.. Limpio y claro muy agradable
ResponderEliminarParece imposible que pueda enraizar y crecer en esa rendija entre las piedras. Si nos fijamos, la naturaleza no dejará de sorprendernos con su capacidad de adaptación.
ResponderEliminarMe gusta el cambio de tu blog, es como un "paseo por las nubes".
Saludos,
La vida está en cualquier lugar y se manifiesta para que la admiremos en todo su esplendor.
ResponderEliminarMagico libro el Tao del que soy un humilde estudioso.
En él esta todo de todo.
Un saludo
Genial, pero yo me quedo con sus deliciosos frutos, me privan. Un abrazo.
ResponderEliminarGosto.Do ar claro, dos comentários de volta, da chuva e das nuvens que já passaram.
ResponderEliminarUm beijinho, Haidée.
La vida se abre paso siempre como el espiritu, como las ganas de superarse.
ResponderEliminarMe gusta mucho esta foto Haidee. Dice mucho con solo una pequeña planta-arbol.
Un abrazo.